Hay varias formas, y razones, por las cuales las personas mantienen un pensamiento positivo, a pesar de las duras y difíciles adversidades que se les presentan en el camino.

Por ello es tan importante entender el poder del pensamiento positivo, y aprender desarrollarlo a través de diferentes dinámicas. Todo es cuestión de compromiso con nosotros mismos, disciplina y muchas ganas de disfrutar la vida.

Sencillamente, lo podemos denotar como el poder manifestar y proyectar lo que sentimos internamente hacia el mundo exterior. La representación física de lo que hacemos o damos a entender a los demás, parte desde nuestro propio “yo”.

Quizás nunca nos hemos detenido a pensar sobre esto y solo actuamos inconscientemente ante la realidad misma que experimentamos o vivimos día a día.

Muchos científicos afirman, por medio de estudios, que las personas, en un promedio diario, pueden llegar a manifestar unos 60.000 pensamientos en todo un día. Aunque aclaran que esta cantidad de ideas no es precisa, ya que puede variar según las actividades que se lleven a cabo.

En el caso de una persona que posea un día pasivo, puede manifestar menor cantidad de pensamientos comparado con una persona que ha tenido un día totalmente lleno de estrés, depresión y trabajo, variables que son netamente considerables.

Todo evento o acontecimiento importante o de trauma vivido, es lo que contribuye a que nuestra manera de pensar resulte ser amigable o, simplemente abrumadora para nosotros mismos.

Estos 8 ejercicios para pensar en positivo pueden influir de forma efectiva en nuestra forma de pensar

Existen muchos factores que ayudan a la persona a tener mejor perspectiva de las distintas situaciones que se nos pueda presentar en el día a día. Sin embargo, no se trata solo de pensar en positivo.

El individuo que cuenta con un alto margen de positivismo enmarcado en todos sus cinco sentidos, tendrá una actitud más audaz y eficiente para la solución rápida a todos los problemas del día a día.

No solo es cosa de ser positivo cuando existan adversidades o momentos felices, sino también de hacerle frente y contrarrestar las posibilidades de que nuestro cerebro comience a pensar en malas cosas que no nos llevarán a nada bueno en el futuro.

1) Demos importancia a lo bueno, evitemos enfocarnos en lo malo

A veces hay mayor tendencia por hablar de las experiencias negativas, y no darle protagonismo a las cosas buenas que hemos alcanzado en determinados momentos.

Esto influye en gran medida para no mantener una actitud racionalmente positiva, y a su vez nos deja esa huella de no darle valor a esos momentos de éxito que hemos tenido.

Uno de los ejercicios más sencillos que podemos poner en práctica es el de intentar pensar solamente en 3 cosas positivas que nos han hecho sentir plenos a lo largo de nuestra vida.

Esto mantendrá ocupada a la mente, a su vez nos permite evadir los pensamientos negativos.

2) Adiós a las suposiciones

En muchos momentos de nuestras vidas, la mente comienza a producir sus propias escenas sobre cosas que están muy lejos de la realidad.

Como personas, cometemos el error de suponer las cosas, lo que es muy negativo para nuestra vida. Y la mejor cura para las suposiciones, es preguntar.

Cada vez que estemos enredados dentro de un panorama de incertidumbre y cargado de suposiciones, debemos de recurrir a las preguntas.

3) Equidad en todo momento

En toda actividad nunca debemos de llegar a un extremo, ni de exceso ni de falta. Encontrar el equilibrio en la balanza es la mejor manera de no quedarse estancado y ser sumamente autoritario.

Si queremos lograr mantenernos con un grado de credibilidad eficiente, para poder enfrentarnos a cualquier adversidad, pues lo que debemos de hacer es encontrar el equilibrio en todos los aspectos posibles de nuestras vidas.

4) No caer en el protagonismo de convertirnos en víctimas

A veces tenemos la mala costumbre de introducirnos en el papel de víctima,

Es un error. Victimizarnos nos acostumbra caer en el territorio de la irresponsabilidad social, personal, laboral, económica y en los aspectos que más pueden perjudicar a una persona.

También los pensamientos sobre negatividad, decirnos que todo sale mal, es algo que tenemos que trabajar para eliminar los pensamientos tóxicos de nuestras vidas.

5) Aceptar la imperfección de las cosas nos hará más fuertes

En muchas ocasiones tratamos que todo lo que vayamos hacer sea perfecto, para poder dejar una buena impresión de nosotros. Aunque no es malo pensar de esta manera, quizás no ayude mucho con los berrinches emocionales por no poder haber hecho bien lo que nos proponíamos.

Para este tipo de situaciones la aceptación es importante, analizar qué hicimos mal para corregirlo y salir ilesos de todo peligro en una próxima ocasión.

6) No catalogar a los demás por algo que hicieron

A veces cometemos el gran error de tildar a una persona por algo que le vimos hacer y marcarlo de por vida. Esto no es bueno, al igual que esa persona, nosotros también cometemos errores. ¿Nos gustaría que nos etiqueten? ¡Por supuesto que no!

Es un hábito desagradable, y dice mucho de nosotros mismos.

7) Proyectémonos hacia el presente

Es normal que a veces comenzamos a pensar en infinidades de situaciones que pudieron haber ocurrido.

Lo único que logramos con esto son dolores de cabeza, estrés, y a veces incluso depresión. Para contrarrestar estos pensamientos existe una excelente y eficiente técnica de meditación conocida como el mindfulness, el cual ayuda al mejoramiento gradual de la memoria y conciencia; el objetivo es enfocar a nuestro ser hacia el presente y dejar atrás esas cosas negativas inciertas.

8) Lo positivo atrae a lo positivo

Esto significa que debemos de rodearnos de personas que alimenten su aura y espíritu de cosas positivas y que llenen el alma de tranquilidad, felicidad y demás cosas hermosas que todo ser humano desearía tener.

Mientras mayor sea el tiempo que invirtamos en compartir con personas (amigos, familiares muy cercanos, etc) que sean más y más positivas cada vez, comenzaremos a asimilar estas acciones con una frecuencia bastante regular, lo que nos permitiría actuar de forma considerablemente muy parecida.

A veces pensamos que algo tan simple como lo es una risa, no ayuda a curar o aliviar ciertas preocupaciones, pero es la verdad. La risa ayuda a incrementar considerablemente el aliento de esperanza y positivismo en todo el ser humano.

“No seamos negativos. Ayudémonos a nosotros mismos a superar las adversidades con estos sencillos consejos y ejercicios para pensar en positivo, no hay mejor forma que contar con el apoyo de una persona o grupo de personas que nos hagan sentir mejor que nunca y siempre recordando que cada día hay un nuevo día, acompañado de un sol radiante al cual hay que mostrarle siempre una sonrisa.”

Jhonaikel Guglielmelli El poder del pensamiento positivo 7/OCT/2019 Mente Diamante (2020) Recuperado de: https://mentediamante.com/blog/poder-pensamiento-positivo#:~:text=%C2%BFQu%C3%A9%20es%20el%20poder%20del,desde%20nuestro%20propio%20%E2%80%9Cyo%E2%80%9D